miércoles, 25 de junio de 2014

Una prima de belleza

Una prima de belleza

Cecilia Rodríguez
Una investigación reciente sugiere que la belleza física es una fuente de desigualdad que afecta salarios, promociones laborales e incluso la forma en que los demás perciben la competencia de una persona.

Por: Cecilia Rodríguez
7:12 pm | 24 de Junio del 2014
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LUXEMBURGO. ¿Ha notado cómo las cámaras de televisión buscan a mujeres bonitas entre el público durante los partidos del Mundial de Fútbol?

Sí. Ciertamente muestran también a fanáticos disfrazados, con caras pintadas y pelucas de colores. Pero ellos no importan. Porque las caras bonitas del Mundial son un buen ejemplo para el tema de esta columna.

Es que una vez más se ha probado científicamente que la apariencia física se debe añadir a la lista de factores que proporcionan una ventaja o desventaja en la vida. Una investigación reciente sugiere que la belleza física es una fuente de desigualdad, que afecta salarios y promociones laborales e, incluso, la forma en que los demás perciben la competencia de una persona.

Otras investigaciones habían probado ya que la preferencia por los más bonitos empieza temprano. En la escuela, los niños y niñas atractivos son percibidos como más inteligentes, con mayor potencial para triunfar, y reciben mejores certificaciones.

En el libro El atractivo físico y la acumulación de capital social y humano en la adolescencia, los autores estudiaron a más de 9.000 estudiantes y llegaron a la conclusión de que la apariencia personal tiene poderosos efectos sobre sus oportunidades de vida. "Nuestra investigación muestra que el período crítico de la desigualdad basada en apariencia empieza en la escuela", afirman.

Hay investigaciones que demuestran parcialidad por los más atractivos, no solo en el área de los estudios escolares, sino en resultados electorales y en juicios con jurado. Un estudio el año pasado descubrió que hasta los papás y mamás tienden a preferir a los hijos mejor dotados físicamente.

En el terreno profesional la cosa ha sido tan estudiada que no hay dudas. "Gente guapa tiene una mejor oportunidad de conseguir un trabajo, ya que los entrevistadores valoran a un solicitante bien parecido más favorablemente –concluye uno de esos estudios–. Incluso si el entrevistado no va a tener contacto con el público."

A niveles más altos, la cosa se pone aún más desigual. Una serie de nuevas investigaciones sugiere no solo que a los directores ejecutivos guapos se les paga más generosamente, sino que en realidad son mejores para sus empresas en formas sorprendentes.

Directivos atractivos tienen un impacto positivo y significativo en el rendimiento de las acciones, sobre todo cuando aparecen en la televisión, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Wisconsin. "Nuestros hallazgos sugieren que los directores ejecutivos más atractivos tienen una compensación más elevada porque crean más valor para los accionistas a través de una mejor destreza negociadora y una buena imagen y visibilidad", dice.

Daniel Hamermeshel, autor del libro ¿Por qué la gente atractiva tiene más éxito?, dice que las mujeres bonitas tienen más probabilidades de entrar en el mercado de trabajo. "Es injusto, pero cierto, que las personas bellas tienen más éxito que los feos", escribe. Según el libro, las personas atractivas son percibidas como líderes más competentes, negociadores más duros y trabajadores más inteligentes. Un tercio de los hombres más atractivos ganan 4 por ciento más que hombres intelectualmente similares (pero de aspecto normal). Los más feos hacen un 13 por ciento menos. Es algo así como una prima de belleza, que no es abiertamente reconocida por nadie.

Una de las explicaciones es la teoría biológica que sugiere que la razón de fondo está en que la belleza es un indicador de buenos genes y buena salud.

Desde esa perspectiva, las operaciones de cirugía estética, el bótox, las liposucciones y demás tratamientos embellecedores podrían verse como inversiones. Y el dicho ese de que "las apariencias engañan", como una máxima de gran sabiduría.


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