Luis Eduardo Garzón
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| Luis Eduardo Garzón | |
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| 1 de enero de 2004 – 31 de diciembre de 2007 | |
| Precedido por | Antanas Mockus Sivickas |
| Sucedido por | Samuel Moreno Rojas |
| Datos personales | |
| Nacimiento | 15 de febrero de 1951 (59 años) Bogotá, Colombia |
| Partido | Partido Verde |
| Profesión | Sociólogo y estudios de derecho |
| Alma máter | Universidad Libre de Bogotá |
| Residencia | Bogotá |
| Sitio web | http://www.luchogarzon.com/ |
Luis Eduardo Garzón también conocido como Lucho Garzón (Bogotá, D.C., 15 de febrero de 1951 - ) es un político y ex activista sindical colombiano.
Garzón fue Alcalde Mayor de Bogotá, de 2004 a 2007; candidato presidencial en 2002 y precandidato por el Partido Verde para las elecciones presidenciales de 2010.[1]
Después de haberse retirado del partido de izquierda Polo Democrático Alternativo en mayo de 2009, Garzón se unió a los ex alcaldes de Bogotá Antanas Mockus y Enrique Peñalosa y juntos adhirieron al Partido Verde en septiembre del mismo año.[2]
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[editar] Biografía
Garzón proviene de una familia humilde, hijo de Eloísa Garzón quien le dio su apellido puesto que su padre no lo reconoció legalmente; en su juventud trabajó como caddy en el Country Club de Bogotá. Estudió algunos años de Derecho en la Universidad Libre de Bogotá y posteriormente se vinculó a Ecopetrol como oficinista, ingresando a la Unión Sindical Obrera, gremio sindical de esta empresa estatal. Desarrolló parte de su actividad sindical en Barrancabermeja[3] y llegó a pertenecer a las filas del Partido Comunista Colombiano. Ascendió en la estructura de la USO hasta convertirse en su presidente y posteriormente fue el primer presidente de la CUT (Central Unitaria de Trabajadores de Colombia) elegido por sus afiliados.[4] En el año 2007 le fue concedido el título de Sociólogo, Honoris causa, en reconocimiento a su labor en la planeación y dirección de Bogotá, así como en el desarrollo de la política social durante su gobierno de la capital de Colombia.[5]
[editar] Aspiración presidencial
Para las elecciones presidenciales de 2002, fue postulado como candidato por la agrupación de izquierda Frente Social y Político de la cual fue uno de sus fundadores, registrando alrededor de 1 punto porcentual hasta las elecciones legislativas de marzo. Tras el excelente resultado de los distintos sectores de izquierda en estas elecciones (ANAPO, Vía Alterna, Frente Social y Político, entre otros) su candidatura recibió un impulso significativo y se conformó la plataforma del Polo Democrático. Concertó la nominación vicepresidencial de la excombatiente del M-19 y ex Senadora Vera Grabe. Finalmente obtuvo el tercer lugar en la elección, con más del 6% de los votos, detrás de Álvaro Uribe Vélez y Horacio Serpa, y superando a la ex ministra Noemí Sanín.
[editar] Alcalde
[editar] Campaña
Los principales líderes del Polo Democrático, encabezados por los senadores Antonio Navarro Wolff (ex militante del grupo guerrillero M-19), Samuel Moreno Rojas (de la antigua Anapo y quien sería sucesor de Garzón años más tarde) y Jaime Dussán (del sector del magisterio colombiano), coincidieron a la hora de decidir postular a Garzón como aspirante a la Alcaldía Mayor de Bogotá.
Para entonces el candidato Juan Lozano Ramírez, periodista y accionista del periódico El Tiempo, ya había presentado su candidatura (con el apoyo de amplios sectores del Uribismo y del ex alcalde Enrique Peñalosa) y se posicionaba como primero en las encuestas. Lozano, hasta dos semanas antes de las elecciones, se perfilaba como el ganador para la Alcaldía de Bogotá. La campaña de Garzón fue enfocada en su carisma con un mensaje de claro acento social y obtuvo el respaldo del Partido Liberal Colombiano, en cabeza de su co-presidente Piedad Córdoba, luego del retiro de su candidato, el ex alcalde Jaime Castro Castro.
Luis Eduardo Garzón obtuvo una victoria contundente el 26 de octubre de 2003, pues obtuvo más de 700 mil votos, la mayor votación en la historia de las elecciones regionales en Colombia (cuatro años después sería superado por su sucesor Samuel Moreno), con una diferencia superior a 100 mil sufragios respecto de Lozano.
[editar] Gestión
La alcaldía de Luis Eduardo Garzón se enfocó en el desarrollo de programas sociales, algunos de sus programas destacados fueron Bogotá sin indiferencia y Bogotá sin hambre que buscaban brindar educación y seguridad alimentaria a la población vulnerable. Durante su alcaldía contó con una amplia imagen favorable según las encuestas.[6]
[editar] Bogotá sin indiferencia
Promovió, entre otras cosas, la creación de varios colegios públicos en barrios marginales de la capital, así como la ampliación y reestructuración de otros con la idea de promover una "educación con dignidad". [cita requerida]
[editar] Bogotá Sin Hambre
Desarrolló programas de nutrición junto con la empresa privada y las universidades con el fin de hacer valer el derecho a la alimentación.[7]
[editar] Críticas a su gestión
Algunas de las críticas a su gestión fueron: el impuesto de valorización, la ejecución de planes de vivienda, la ejecución en temas de movilidad, la ejecución en el tema del espacio público, la ejecución en el tema del tratamiento a los residuos sólidos y líquidos, la remodelación de colegios sin licencia de construcción, la no eliminación de prebendas y beneficios extralegales de los empleados sindicalizados de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, la baja ejecución en la protección efectiva de los cerros orientales de la ciudad.
En cuanto a los temas de movilidad, defensa del espacio público y tratamiento de residuos sólidos, la administración de Garzón comprometió recursos contratando la elaboración de documentos denominados planes maestros. -ver plan maestro de movilidad;[8] Plan maestro del espacio publico[9] y Plan Maestro para el manejo integral de los residuos sólidos,[10] entre otros. Sendos documentos que tardaron varios meses en su elaboración, que costaron importantes recursos públicos, que ignoraron lo avanzado en estos temas en administraciones anteriores y que fueron presentados por la administración de Luís Eduardo Garzón como la solución a los problemas de movilidad, invasión al espacio público y reciclaje de las basuras en Bogotá; Estos documentos, - los planes maestros- fueron convertidos en decretos con plazos hoy todos incumplidos. Decretos vigentes que están a punto de convertirse en perdida de tiempo y recursos públicos para la ciudad.
En cuanto a el tema de movilidad; la administración de Garzón tardó 2 años en realmente comprender en su integridad el problema. A los dos años de posesionado el alcalde, su secretario de movilidad anunció, que se peatonalizarían las carreras del barrio la Candelaria en Bogotá los días viernes y que se estudiaría un plan para peatonizar la carrera Séptima desde la Avenida el Dorado hasta la calle 6. Así también se anunció en este mismo comunicado, que se estudiarían medidas importantes para desestimular el uso del carro particular, como elevar sus impuestos o poner peajes urbanos a la entrada del centro de la ciudad, no permitir el parqueo en bahías de parqueo o incluso aumentar la restricción de pico placa a más días y así mismo estimular el uso del transporte público colectivo y medios de transporte alternativos. Ninguna de estos anuncios, a excepción del primero se llevó a cabo.
Con anterioridad a este anuncio, la única acción importante de la administración Garzón fue la medida desarrollada al principio de su gobierno intentando preservar los andenes libres carros. Se contrató unas compañías que estaban en capacidad de imponer ordenes de comparendos a los personas que estacionaran su vehículo en lugares prohibidos o sobre los andenes, tomando fotografías que demostraran la infracción e inmovilizando el vehículo; orden de comparendo que sería ratificada por la Policía, quien sería finamente quien impondría el comparendo. Esta medida resultó ser efectiva en la protección del peatón, desafortunadamente la administración Garzón las descontinuó a los pocos meses sin mayores explicaciones.
Promediando el segundo año de la administración Garzón, se promulgó el decreto 319, en este decreto la administración se entregaba un año a sí misma como plazo para tener en ejecución la primera fase del Sistema Integrado de Transporte Público, -SITP-. La administración Garzón concluyo su periodo constitucional y los problemas fundamentales para la puesta en ejecución del SITP no se habían resuelto. No se han vislumbrado mecanismos para integral los servicios, es decir unificar las tarifas y que sea posible cambiar de bus o ingresar a Transmilenio por el mismo costo. Reducir en número de empresas prestadoras del servicio público colectivo, y que su esquema empresarial deje de recibir ingresos por cada pasajero recogido sino por kilómetros recorridos, que las rutas sean entregadas por licitación y se controle la frecuencia de buses requeridos en cada corredor.
Adicionalmente, la administración Garzón solo le dio continuidad a medias a la fase III en la construcción de troncales de Transmilenio. A pesar de ser una promesa de compaña, la administración Garzón tardó 4 años y no terminó los diseños técnicos de ninguna de las troncales que componen la III Fase, Av. el Dorado, AK Séptima y Av. Décima y solo adjudicó para su construcción la Av. El Dorado y la Av. Décima. El propio alcalde Garzón argumentó que no estaba de acuerdo con la construcción de la troncal de la Séptima, porque involucraba modificar sectores arquitectónicamente consolidados en los sectores residenciales más ricos de Bogotá.
[editar] Impuesto de la Valorización
Introducido como un innovador impuesto, la reevalución de los valores prediales, y el cobro de sumas incoherentes con la valorización llevada hasta el momento por el distrito ha ocasionado descontento por los dueños de finca raíz, llevando a una suspensión del cobro, e incluso a un llamado popular al incumplimiento del impuesto.[cita requerida]
[editar] Resultados
Según el diario El Tiempo: "los resultados son muy importantes, no solo por el cumplimiento de las metas en cada uno de los programas prioritarios, sino también por los resultados de impacto que ya comienzan a apreciarse, y que corroboran las bondades de la orientación social de esta Alcaldía. Las cifras de la Misión de Pobreza, del Departamento Nacional de Planeación, muestran que entre el 2004 y el 2005 en Bogotá se redujo la población bajo la línea de pobreza en un 4,79 por ciento, y la población en pobreza extrema, en un 3.38 por ciento."[cita requerida]
Estos datos expresan una tendencia que es corroborada por otros estudios, como los del Programa de Desarrollo Humano del PNUD.
Bogotá registra mejoras en el Índice de Desarrollo Humano, en el Índice de Calidad de Vida y en el coeficiente de Gini, que mide la concentración de la propiedad. Estos resultados dan cuenta del compromiso expresado en el Plan de Desarrollo, liderado por el Alcalde Mayor, "Bogotá sin Indiferencia, un compromiso social contra la pobreza y la exclusión".[cita requerida]
Según los estudios que se hicieron de su gestión sus fuertes han sido la educación, el desarrollo económico, y las finanzas públicas, mientras que sus debilidades han sido la creación de vivienda, la ejecucion presupuestal, la movilidad y la calidad de aire.[11]
[editar] Después de la Alcaldía
Días antes de dejar la Alcaldía Mayor, Garzón agitó el ambiente político nacional con unas explosivas declaraciones, tomando distancia del Polo Democrático Alternativo, partido en el que se había transformado la coalición conocida anteriormente como Polo Democrático que lo llevó a la alcaldía, y sugiriendo la posibilidad de crear un "Partido de la Calle", tirado hacia el centro del espectro político, y en el que invitaría a participar a dirigentes y personalidades como Juan Camilo Restrepo, Luis Alberto Moreno y Lina Moreno de Uribe. En marzo de 2008 Garzón ratificó su permanencia en el PDA y es considerado un potencial candidato a la Presidencia de la República para 2010.[3]
En diciembre de 2007 fue lanzado el libro reportaje "Lucho una entrevista de Julio Sánchez Cristo" con prólogo del ex presidente español Felipe González.[12] En 2008 se vinculó al equipo periodístico del programa radial de la mañana de la emisora La FM de RCN Radio y como columnista del diario El Espectador.
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